La vida es un océano inmenso y feroz que justo cuando te dispones a probar su temperatura, la ola más feroz te revuelca, jala, te hunde y cuando sales a flote a que tus pulmones se llenen con el oxígeno que puedan llega una serie más de olas, que piensas... "voy a morir" y te dejas arrastrar por ellas porque sabes que nadar es en vano, es necesario dejarse llevar por la furia de las mismas para arrojarte nuevamente a la orilla; esa persona sentada en la orilla de una playa después de ser maltratada en el agua, soy yo.
Pensé que me ahogaría y moriría, como ellos, sentí que mi vida se fue ... con ellos. Hay veces que aún me ahogo y me duele el pecho, pero todo pasa, todo pasó ya, cinco años para ser exactos, mi psicóloga dice que no volvemos a ser nosotros mismos, soy una versión nueva de alguien que redactó esto que lees abajo, no se si realmente mi chispa se apagó o si sigo tratando de respirar en la orilla, espero que sea lo segundo y poder nadar otra vez en mi mar.
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